Cuando oí la palabra customizar ropa por primera vez, no tenía ni idea de que se trataba. Siempre hemos hecho arreglos en las prendas de vestir pero no de este modo.
Tenía un vestido que no utilizaba, pensé transformarlo y con una camiseta básica lisa, hice un conjunto de dos piezas.
¡Manos a la obra!
Corté el vestido por la parte de la cintura y le puse una goma para que ajustara.
Con la parte de arriba del vestido, corté letras y flores, desiguales, sin ningún patrón previo.
Coloqué las piezas de modo que quedaran bien y las fui cosiendo con un simple hilván a mano.
Así quedó el conjunto, transformado total y como nuevo.